Los ojos húmedos
en columpios oxidados,
la imaginación en duelo
con los recuerdos,
futuro contra pasado.
Las manijas circulan
demasiado rápido,
más quizás que la luz
a mis ojos fijos
sobre el reloj.
Y no vale romperlo,
el sol y la luna
seguirán girando
mientras nosotros
caminamos lento.
Y no sé apresurarme,
la muerte segura llega
mas la fecha incierta
me obliga a no apartar
mi oído de su silencio.
El tiempo maneja
mis hilos atados al futuro
y me dijo que ayer
encontró mis ojos
humedecidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario