Tenemos algunos cigarros
y también un mechero,
portamos el alma libre
y llevamos el pelo suelto
tú hoy desvistes al blanco
porque yo visto de negro,
un compuesto de grises
en los confines del cielo
hay salitre en los charcos
y veneno en los suelos,
qué tristes las cicatrices
sin tener tacto al fuego
hemos pensado dejarlo
con llamas en los dedos,
o ser felices por narices
quemando este universo.