Puede que me quede sin descendencia,
pues mi hijo no se merece este mundo
y este mundo no se merece a mi hijo
los hombres casi han matado incluso
a la mismísima madre naturaleza
y además han convertido el consumo
en un consumismo sin fronteras.
Un pequeño paso para el hombre
es un gran peso para La Tierra,
hay llantos que la polución esconde
y mantos que ocultan estrellas
del individualismo no se come,
pero es tan egoísta el planeta
que si no damnificara el orden
dejarían que este muriera
como un perro en la carretera;
como un bosque que se quema;
como un glaciar que se deshiela.
Creo que estamos jodidos
si creemos que no estamos
jodiendo la existencia.