domingo, 30 de agosto de 2015

Dímelo cada día.

Déjame salvarte
necesito verte
y contarte
que eres arte.

Un punto aparte
por todas esas veces
que durante meses
caí en combate.

No se me hizo tarde
lo de escribirte
porque lo triste
como tú, ahora duerme.

Yo sigo insomne
sabiendo que temes
que nada vaya a ir bien
por algunos errores.

Estos se pagan caros
pero hoy invito yo.
No por caballero
sino por ser humano.

Todos nos equivocamos
al fin y al cabo
pero rectificar
es de sabios.

Se separan tus labios
y se acaba la rabia
sonríes a cambio
de unas simples palabras.

Yo soy uno más
que rompió promesas
pero nada avanza
si no perdonas.

Hoy empieza una nueva era
donde dejarás marchar la ira
donde aprovecharás las horas
y donde me dirás que nunca te irás.

Dímelo cada día
que no te irás
al menos mientras
conmigo sonrías.



sábado, 29 de agosto de 2015

Soplaré las velas.

Soplaré las velas
para quedarnos a oscuras
si una velada a ciegas
todo lo cura.

Corramos un tupido velo
dejando atrás el pasado
olvidemos todo lo malo
si el tiempo nos ha perdonado.

Agarrado a tu mano
todo vuelve a tener color
y el dolor aguantado
no ha sido en vano.

Tu amor en vena
acaba con el veneno
pues este vino
antes de que muriera.

El cielo en obras
el infierno en ruinas
todo me sobra
si eres mi rutina.

Amanecer en tus sábanas
y escribir en tu espalda
que solo habrá mañana
si me recuerdas.

Te recitaría una oda
y hoy sería la segunda
no como los poetas de ahora
con sus rimas eventuales y absurdas.

La vida sigue siendo trágica
pero escribiéndote con música
y describiéndote con palabras
también es única.


Gélido y árido.

Volqué mi reloj de arena
y se perdió entre dunas.
Dime si esto es una condena
o si me cansé de pedir ayuda.

La tregua de tu sofá
calentaba mis cafés
dónde fue a parar
lo que ya se fue.

Escribí sobre márgenes
sin seguir órdenes
pero cómo tener orden
si siempre estuve al margen.

Escritor de páginas
pintor de láminas
perdedor del ánima
todo esto entre lágrimas.

Tétrico
ascético
artístico
poético.

No importa la estructura
si el resultado es el mismo
yo solo al borde del abismo
a cientos de kilómetros de altura.

En un camino lleno de piedras
no hallo nada debajo de estas
dime dónde se encuentra
la suerte que me falta.

No me sueltes si me atrapas
ya puse trampas en los rieles
ahora ríete si el tren pasa
y en mi parada no te subes.

En mi cielo nubarrones
en el tuyo nubes;
da igual la diferencia
entre blancos y grises.

Llamé ''paraíso''
a un oasis ficticio
tal vez por el vicio
a parajes tristes.

Pero me cansé de estos
te encuentras en el norte
y yo en el sur sin verte;
como dos polos opuestos.

Hazme señales de humo
quemando mis poemas
así sabré que al menos
merecieron la pena.

Se derrite la nieve
y se acaba el fracaso
si me envuelves
entre tus brazos.

Del cálido al frío
y del frío al cálido
ocupaste mi vacío
ahora gélido y árido.

En el punto medio
que me dio remedio
me refugio en tu asedio
y adiós a mi vacío.



lunes, 24 de agosto de 2015

La obra de mis ruinas.

Te escribiré mil poemas
no para llevarte a la cama
sino para colmarte de los manjares
que esos majaras, no saben darte.

Navegaré por tus mares
hasta encontrar la orilla
y te escribiré en la arena
que no paré de buscarte.

Si tú eres mi condena
no lamentaré mi pena de muerte
en todo caso romperé las cadenas
que no me dejan verte.

El arte no se mide en pinceles
se mide en las pinceladas de colores
 que puedan darte y partir los estándares
de la gente corriente.

La obra de mis ruinas
todo sobra si me miras
otra sobredosis en vena
de reflejarme en tus pupilas.

La Gioconda se revuelca en su tumba
si su belleza se torna en duda
porque tú en pintura
eres más bonita que ella.

Déjame decirte que existe el más allá
donde yo soy el fuego y tú el agua
que apaga las llamas
que prenden mis poemas.

Siendo la enésima poesía
en una milésima de segundo
seré la manta que calienta
tus noches frías.

Tu café por las mañanas
las caricias que te faltan
y entre tantas
eres tú o ninguna.

Eres la luna que ilumina
las estrellas que brillan
si perdí el norte
serás mi brújula.

Baila sobre las agujas
detén el tiempo
déjame ser la burbuja
que vuela por el cielo.

Quiero leerte en braille
invitarte a ese baile
respirar tu mismo aire
viajar al edén.


domingo, 23 de agosto de 2015

Atardecer rojo.

Cuando ni escribir me salva
y no me queda saliva
para decirte que te recuerdo
pero que tú me olvidas.

Encaminando mi vida
hacia ninguna salida
solo me queda
darte por perdida.

Y contar las pérdidas
que se acumulan.
No quedan estímulos
si nada es recíproco.

Perdí lo poco que tenía
por confiar en la esperanza
otra traidora arpía
que en mi tristeza danza.

Ya nada es válido
si acabo en un psiquiátrico
ciego de pastillas
por un eterno mal trago.

Un halago no hará
que el día deje de ser aciago
si solo valgo para darlo todo
y quedar destrozado.

Nací en una época
exenta de poetas
donde mi mano no sujetas
y el amor caduca.

Solo la cámara reflejará
lo que amarás
para hacer flashbacks
de lo que del pasado guardarás.

Y quemarás si quedan más
de mis poemas.
Y qué más dará
si te calientas con sus llamas.

Pirómana pero en mi cama
mis tramas acaban en dramas
tus lágrimas en lava;
dos volcanes a la deriva.

La noche empieza y el día acaba
no brindaremos con cava sin alegría
porque los cristales de estos se clavan
en el fondo de mi poesía.

Y en este atardecer rojo
no hay atajos
solo un contrarreloj
al cielo contra el tiempo.


jueves, 20 de agosto de 2015

Contigo cerca.

Me persigue la rutina
se ríe de mí la luna;
un lunático en ruinas
al que sus poemas asesinan.

La fina línea que dibuja
la hoja de una cuchilla
se asemeja a la que dejan
las olas al llegar a la orilla.

Filosofando a altas horas
en la madrugada infinita
escuchando bandas sonoras
que a morir me incitan.

Me iría si no fuera por promesas
que hice a quienes ya ni se acuerdan.
Que me acusen de cobarde
pero ya se me hizo tarde.

Solo tengo alarde de torpe
haciendo honor a mi ser
busco luz donde el negro
al menos se pueda esconder.

En el camino de rosas
solo hay espinas
escupo sangre
el dolor no termina.

Muchos opinan
sin tener ni idea
su verborrea
es una mina.

Sepultaría esta
como respuesta
a lo que resta
su palabrería.

Escribiría hasta el fin
de mis días;
y si el final está cerca
deja que sonría.

Pasé página y llegué
a la contraportada
no si escribiré otro libro
ya que este no me contó nada.

Me cortó con sus filos
lo hicieron también los folios
que dejé a medias
en mi escritorio.

Se me acabó la tinta
por tonto compré otra
y por tanto seguiré escribiendo
hasta acostumbrarme a la derrota.

Te dejaré una carta
si me faltas
pega los pedazos
si está rota.

Seguiré la ruta
espera un minuto
a ver si reto
a mis grietas.

Y todo acaba con
mi tristeza muerta
mis mejillas secas
y contigo cerca.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Ya solo me queda velar.

Tan poético como patético
escribir un final romántico
sabiendo que va a ser tan trágico
como el de los soviéticos.

Las palabras dejaron de tener valor
porque dejaron de hacerme volar.
Ya solo me queda velar
por no hacerme valer.

O porque quizá nadie apreció
lo que solo yo sé hacer;
despejar el cielo de nubes
para que deje de llover.

Me tienta vivir en un cuarto
sabiendo que si salto
el asfalto vomitará todo lo que 
no pude decir en voz alta.

Se me atragantan las palabras
y no dejo salir las letras
que escribirían un poema
para acabar con mi vida.

Me quité la venda
sangran las heridas
y por no esconderlas
mal me miran.

Todos murmuran
todos critican
que aprendan
de mi día a día.

Me refugié en la poesía
que me acusen de terrorista
por querer a personas muertas
esa farsa a la que llaman policía.

Me fallaron tantas
se fueron otras
y algunas volvieron
para cortar mi aorta.

Qué proeza ser poeta
en tiempos de guerra
sabiendo que en esta tierra
todo serán derrotas.

Juega con fuego y me quemas
juega con agua y me ahogas;
juega ahora con las cenizas
que sobrevuelan las olas.

Se apagaron las farolas
a oscuras y a solas
se paran las agujas
que marcan las horas.

Apuré las últimas
para escribir
lo que no pude
antes de morir.

viernes, 14 de agosto de 2015

Sigo en la batalla.

Llenando huecos del corazón
vacíos y sin eco.
Conformándome con poco
recordando manos que ya no toco.

Y agarrado a estas vi al universo pequeño
como un niño al que no le interesa su peso
que solo piensa en regalos de cumpleaños
y no es preso del exceso que provocan los años.

Volviendo a aquellos tiempos
no en los que todo era campo
sino en los que campaba a mis anchas
y no existía el ansia por querer ser perfecto.

Con especial emoción los recuerdo
y no hay cuerda que dar al reloj
pues quise que se parase el tiempo
para no empezar a ser mayor.

No estoy en el Olimpo
no soy un Dios griego
antes que ser Apolo
vuelo al cielo.

El doble sentido
el cual uso y admiro
como amar y odiar
a alguien que te ha destruido.

Quizá mis escritos sean quemados
por no ser entendidos.
Pero en ese incendio
se llenará mi vacío.

Por ser diferente
por no pensar en mí mismo
por estar en el abismo
y preferir salvar a un desconocido.

Por autodestruirme y no quererme
por ser tu carne solo el viernes.
Porque el sábado mis sábanas
estarán llenas de sangre.

Tropiezo mil veces
mis piezas son tus heces.
Mis pies vuelven por el camino
que me llevó a conocerte.

Tras tirar de la cadena del retrete
volveré a las cloacas donde me viste
triste, en épocas de vacas flacas
que aún resisten por no tirar la toalla.

Sigo en la batalla
como Troya
sin caballo
hasta que me destruyan.

Por confiar en personas
que no demostraron nada
ojalá exista el karma
y les salga cara la jugada.

Que me hagan vudú
con alfileres
ya en mi iglú
va a anochecer.

Y anoche soñé que volvía a ser
aquel que resiste cada golpe
sin querer llorar
hasta el amanecer.

miércoles, 12 de agosto de 2015

Masha.

Me absorbe la madrugada insomne
pensando que anoche te soñé.
Soy un torpe que no suele soñar siempre
pero de no despertarme me ocupé.

Te robé unos minutos
también unos abrazos
caminé descalzo
sin poderte ver.

Pero supe que eras tú
seguí tu luz
liberándome
de mi cruz.

No eras la arpía
que me humilla
en mis pesadillas
y me clava escarpias.

Sin flores mustias
todo cambia
te las ingenias
para calmar mi angustia.

Vámonos al Cáucaso
paguemos con rublos
si acaso con excusas
nuestros errores al diablo.

Sin preocuparnos de lo demás
no temas; toma mis poemas
aquí dejo mi más sincera
solución a los problemas.

Solo seré de derechas
si estás a mi izquierda
se cerró la brecha
de nuestras heridas.

sábado, 8 de agosto de 2015

Me pierden tus ojos verdes.

Me pierden tus ojos verdes
si los miro fijamente.
Me sacas de este vertedero
con solo verte.

El cielo vuelve a ser celeste
oteo las nubes grises
alejado del desastre
que acabaste por romper.

Huésped en tu corazón gigante
que más allá de lo triste
hace que resista a los trenes
que lograron atropellarme.

Y si me llevaron por delante
que me bajen en tu estación
ya anduve por suficientes andenes
sin ton ni son.

Ni cuento con la suerte
ni la necesito
si viene la muerte
dile que sigo vivo.

Ya me aparté del precipicio
y encontré motivos
para darle algo de color
a todo lo que escribo.

Un poema más, un poema menos
pero uno que no se tiñe de negro.
Porque contigo encuentro consuelo
y arreglo el reloj que paró mi tiempo.

Que se jodan las rejas si las rompo
hace mucho que la vida juega a su antojo
y si te alejas, recorro cielo y tierra
para no dejar que tu mundo se tiña de rojo.

jueves, 6 de agosto de 2015

Ya no brillo para nadie.

Solo en un mundo de sordos
que ignoran mis palabras.
Solo en un mundo de ciegos
que ignoran mis miradas.

Me levanté mirando al cielo
y desde el caos queda lejos
cómo soportar el reflejo
en un espejo ya roto.

Me repito y se nota
que vomito metas
que un día soñé
y ahora boto.

Veto la felicidad
si no soy próspero
y nunca lo soy
así que ponte cómodo.

Vi cómo vuelan los pájaros
y nunca seré como ellos
porque ellos van en bandadas
y yo ando solo dando bandazos.

Ojalá saciar mi dolor con abrazos
y no ser los pedazos de algo ya muerto.
Experto en perder lo que quiero
y también en perderme en tus besos.

Pero lo segundo ya no lo tengo
y veo el vaso medio seco
hasta que acabo por tirarlo
y agrando mis recovecos.

Un corazón hueco no tiene eco
y creo que el mío tampoco.
Como locos amándonos los dos
es algo que ya solo recreo en mi coco.

Si no echo de menos, no soy yo
si hablo del pasado, me enrollo
pero en tus sábanas ya no
no me manteas ni eres mi apoyo.

Cantan los grillos
silencian mis gritos
me autodegollo
con tus cuchillos.

Ya no brillo para nadie
ni siquiera para mi madre
no me eches un cable
si no es para estrangularme.

Reaparecen las ganas de desaparecer
y parece que fue ayer cuando estaba bien.
Empecé a componer para ti
y mis partituras están en la basura.

Ahora te escribo y me clavo mi boli
mezclando tinta con sangre en un cáliz
del que beberás y te acordarás de mí
para volverme a sentir dentro de ti.

Ya no estaré, no estaremos
si vivir así es morir
y yo morí hace mucho
al menos nos recordaremos.

martes, 4 de agosto de 2015

Quizá por mis errores.

Hablaste de un ''siempre''
y no quieres volverme a ver.
Si el pasado no fue mejor
dime entonces qué lo es.

Pensar en pensar
no elimina mi pesar
y ha bajado mi peso
por pasar de todo a nada.

No quiero prozacs
necesito de tu prosa
decir adiós a la poesía
y volver a reposar.

Nada me alivia
se fue la valquiria
y ahora la batalla
está perdida.

Quizá por mis errores
por no ser buen guerrero
por usar de armadura
el azul de tu cielo.

Se derrite el hielo
no por el cambio climático
sino por las llamas
de mi infierno.

Al cuerno mando
todos mis textos
es el enésimo
de sufrimiento.

Y si no puedo
volverte a ver
de qué sirve vivir
vete tú a saber.

Tanta incertidumbre
tantea mi mente
al traste
mis costumbres.

Llega la lluvia ácida
quema mi piel
resiste el papel
solo queda esperar.

sábado, 1 de agosto de 2015

Pusiste un punto.

Cuando ni escribir me sale
y andando por la calle
recuerdo los canales de Venecia
que nos prometimos
me invade un vacío
que no se llena
ni con todas las mujeres
del espacio.
Reacciono a tus indirectas
con indiferencia
pero se me infecta
la herida pensando
en tu ausencia.
Tú de fiesta mientras
en mí se manifiesta
el dolor por no ser los dos
que 'Romeo y Julieta' representan.
Adiós a poner letras
en nuestra historia
el tiempo las borró
qué engorro
pensar que tienes
la vida hecha
y más tarde
que todo terminó.
Sigo escribiendo poemas
que quizá quemas
o acabaré quemando yo.
Mientras algunos
son felices con poco
yo me conformé
con el primer non
como un loco
creyendo
en un Estocolmo juntos.
Pusiste un punto
yo le añado dos
y unos segundos
para volver
a vernos.
Yo que te echo de menos
tú que me echas de más
yo lleno de queroseno
tú queriendo prender la llama
yo rezando porque no haya gas
tú usando otro mechero
para por fin acabar
con todo esto.
Echando el resto
en unos textos
que reflejan la ansiedad
y de querer tenerte
hasta la saciedad.