domingo, 17 de julio de 2016

Centímetros cuadrados.

Quiero escribir
escribir
hasta que ardan mis manos.

No aparezcas hoy
ni tu voz
ni tu sombra.

Déjame a solas
con un café
cortado con lágrimas.

Como cualquier
domingo de antaño
en soledad.

Escuchar el clamor
de los grillos
me satura.

Invoco al silencio
solo interrumpido
por el trazo de la pluma.

Traslado mi mente
a paisajes devastados
por fuegos inapagables.

Metáfora de mi vida
en continua reconstrucción
para volver a la ruina.

Tres lápices rotos
contrastan con la felicidad
de hace unos días.

Quiero escribir
escribir
hasta sangrar.

No sientes mi dolor
pero si lo sintieras
llorarías más que yo.

Vivo en centímetros cuadrados
con la luz apagada
y rodeado de navajas.

Pero nunca
entiendes
mi dolor.

Tienes la llave
en un bolsillo
sin querer usarla.

Yo ando perdido
imaginándote
en la oscuridad.

Pero no quiero verte
no quiero escucharte
solo sentir que me quieres.

Resucité cien veces
y para qué me sirve
si la felicidad no me sigue.


No hay comentarios:

Publicar un comentario